Turegano´s Runners: MEDIO MARATÓN VILLA DE MADRID 2014

Os dejamos la gran crónica de nuestro compañero Paco que ha debutado en Medio Maratón con unas sensaciones espectaculares. Os la recomiendo, por que son de las que animan a ponerte las zapas y salir pitando:

Todo surgió en una reunión de amigos en noviembre. De ellos, algunos ya son habituales en participación en pruebas que van más allá de los 5 ó 10 km, es decir, en medios maratones y maratones. Yo, en cambio, nunca había dado el salto a esas pruebas. El caso es que surgió el apuntarnos a la Media Maratón Villa de Madrid, los expertos nos animaron a los principiantes y en ese mismo momento nos apuntamos todos para que nadie se echara atrás.
Llegó el mes de enero en el que había que empezar la preparación pero yo arrastraba una lesión y hasta febrero no pude empezar a entrenar. Sentía que el tiempo se me echaba encima, pero poco a poco iba aumentando el tiempo de entrenamiento, pero me costaba salir a correr y dejar de lado mis otras aficiones deportivas, sobre todo fútbol y spinning. Ya el mes de marzo lo dediqué exclusivamente a correr, pero no encontraba buenas sensaciones y sentía que no iba a ser capaz de acabar el reto. A mediados realicé una tirada larga de 16 km, antes nunca había pasado de los 10 km, y acabé destrozado y me vine un poco abajo. Mi entorno me seguía animando y eso se agradece.
Llegó el día de la carrera, muchos nervios desde el primer momento. Mi reto, en primer lugar, era acabar la carrera y en el caso de hacerlo poder bajar de las dos horas. Me aconsejaron colocarme en la liebre (globos) de 1:50, porque ya habría tiempo de quedarme más atrás. Salimos del Retiro, en un primer momento había mucha gente y era muy fácil seguir el ritmo, pero a medida que se iban abriendo espacios el ritmo subía y yo veía que el "globito" se alejaba cada vez más. Llegué a Plaza Castilla, apunto de cumplir los 10 km y fue el momento en el que me iba sintiendo mejor y podía ir recuperando todo el espacio que me separaba de la liebre 1:50. Alrededor del km 13 ya estaba a su altura e iba oyendo a mi alrededor que la gente se iba agotando y mi sensación era al contrario, me sentía con fuerzas de superar la liebre y tirar delante. Lo hice y era una sensación fantástica el ver que iba a conseguir acabar y además con una excelente marca personal. Al llegar cerca de El Retiro quedaban unos 4 km, había que bordearlo, había mucha gente viéndolo y sobre todo animando a todos los que pasábamos y fue el momento de echar el resto. En la entrada a El Retiro estaba exhausto y no veía la meta, había muchos arcos inflables pero ninguno era el del tiempo, ¡qué mal rato! Pero al llegar y ver que mi tiempo había sido de 1:46:10 fue un subidón. Quedó claro que no es lo mismo correr tú solo mientras entrenas, que correr en un carrera en la que la motivación propia, el ambiente de corredores y el público animando, da una fuerza extra que hace dar el máximo de uno mismo.
Así que la vivencia fue tan buena que la repetiré. De momento, el próximo reto es el día 11 de mayo en La vuelta a la Casa Campo.